Poemas porque sí

SOBRE LA HUELGA

Si yo fuera malo...
pero me puede el pudor
que me impide demostrar
que han estado equivocados.
No es que sea supersabio
para alcanzar a entender
en base a la inteligencia
lo que otros pueden no ver;
o si pueden, poco inquieta,
ni siquiera el cuestionarlo,
mucho menos plantearlo
a donde llega la afrenta,

de este tiempo de infortunio
que ha tocado vivir
pues la lucha en el trabajo
puede llegar a su fin
como lo hemos entendido
como algunos lo han luchado
como era defendido
y que ahora se ha acabado.
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JAZZ

I
Vuela, aletea
con insustancial presencia
sólo música es esencia
sin un cuerpo, sin la carne
pues todo queda en el aire
como nos queda en la mente
nos taladra dulcemente
desde ahí corre y se expande
y se convierte en un juego
donde me acerco y me alejo
donde se llega y se va
con insistente aleteo
que busca en la cima, el pico
de la melodía, y luego
con singular coqueteo
ir cayendo en un compás
cuando quiero y donde quiero
¿qué es sino la libertad
lo que nos enseña el Jazz?

II

Por eso yo mismo quisiera
ser del trombón un maestro
lo mismo del saxofón
del piano, la trompeta
y caer en torbellino
seducido por la orquesta
tocar la clave, la caja,
el bombo y los platillos
las baquetas, escobillas
para aporrear al mundo
para aportarle belleza
conseguir en un segundo
dar la vuelta a la cabeza
convertirla en un torrente
notas, ruido, pulso fuerte
desbocado alegremente
haber caído y seguido,
subido en un escenario
levantarme, enorme, erguido
golpeo, soplo aporreo
las pulsiones de mi mente
y así llegar a la gente
con la que quiero y comparto
donde pasar un gran rato
depurado, engrandecido
liberado, sofocado
el fuego en el que ardía
y alcanzar la libertad
por la música de jazz
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Rafael Cuevas.