Acetre en Trujillo

Una vez más sobraban los motivos para saber aprovechar el momento eligiendo de entre las posibilidades. El concierto, ¡ex-ento de pago!; el lugar, la monumental ciudad de Trujillo; la ocasión, la pintan calva; la compañía, de gusto compartido…

Todo conjugaba a la posible repetición de algo gozoso, que no por repetirse toma cariz de monótono, antes bien, las dosis son intensas y distantes en el tiempo.

Volvemos a la Ex, en un día ex-tremadamente caluroso por ex-traño que parezca en este primero de Junio, y a un lugar ex-tremadamente bonito, para ver a los ex-celsos músicos de Acetre en concierto, el que por ex-igencias climatológicas se suspendió allá por Abril, y que les ha debido de cuadrar en estas fechas sin ex-cusas y así cumplir esta vez con su público Trujillano, ese que con ex-pectativa se arremolinó ex-tramuros de la ciudad antigua, casi en el ex-traradio, en la plaza-paseo Ruiz de Mendoza para presenciarlo, Una gran plaza ex-planada. A un lado, el escenario, en el frente ex-acto a este, el bar terraza atendido por ex-acerbantes no profesionales (era evidente su poca destreza) pero que servía de “abrevadero” a los asistentes, sorprendentemente prestos a los ex-cesos de una cubatada. Un ambiente entre festivo, familiar, ex-citantemente veraniego acompañó al éx-ito de la ex-ibición que nos dejó ex-hautos de gozo  por la ex-periencia de la ex-ultante ex-posición de ex -tensa ex–quisited....

Bueno, vale de tanta ex, pues todo es un juego que viene por Extremadura, es que por allá marcan las carretas con esas letras…

Rafael Cuevas