Me gusta Sabina
mucho, y Serrat. El otro día me comentaron de un conocido que había ido a ver
el concierto de Serrat y sabina, creo que coincidía con el día de la infamia de
excesos policiales y suponíamos que en
ese concierto, los artistas, se referirían a los hechos en términos
reprobatorios, en realidad no sé si fue así o no. No he tenido la ocasión de
hablar con él, ni lo haré, por que como
he dicho era conocido, vamos que le conozco, simplemente sé quién es, no tengo
la más mínima confianza para hablar, ni la oportunidad para poder hacerlo,
luego, desconozco sus impresiones del concierto y las de ninguna otra fuente,
pues nada he leído al respecto.
Hasta aquí,
bien, pero el hecho curioso es que ese conocido mío es afiliado convencido del
PP, y puede que hasta numerario. ¿por qué?, pues, al igual que las clases
trabajadoras tienden a identificarse con opciones políticas de izquierdas, supongo
que éste lo hará por su tradicional ideario conservador, aunque quizá no lo sea
tan tradicional pues proviene de una familia relativamente humilde que fundó un
floreciente negocio, el cual de alguna manera heredó, lo que corrobora que
cuando alguien alcanza superiores niveles sociales, rápido se olvida de su
procedencia, puesto que gozando de alto nivel de poder adquisitivo, se tiende a
buscar quien defienda su status desde posiciones de liberalismo económico,
precisamente el menú que ofrece el partido P. y a este conocido mío le viene al
pelo.
Este
conocido mío, disfruta de grandes viajes mundanos vacacionales, o no; ha podido
ofrecerles a sus vástagos una excelsa educación privada elitista bilingüe de
verdad, con prolongadas estancias en países anglófonos , por lo que a día de
hoy, ya creciditos, han pasado a formar parte por méritos propios, y la gran
cantidad de dinero invertido en ello, de
la clase media alta, ya situados, colocados y proyectados a ser parte de los
que mandan o deciden; poseen múltiples propiedades urbanas, en la costa, en el
centro, en la periferia, todas integran una decoración de un alto grado de
sofisticación; grandes coches han habitado o habitan en sus garajes, eso sí, ni
ferraris, lamborginis, o porches, más bien, mercedes de alta gama, BMW’s, o
volvos..., en fin todo un prócer al más puro estilo de lo que cantaba la
canción de Claudina y Alberto Gambino.
Lo curioso
de todo esto, se estarán preguntando es : a santo de qué, este buen señor
acompañado de su familia, fue al concierto de Serrat y Sabina, lo que me lleva
a reflexionar al respecto de la cuestión.
¿Acaso la
música o la poesía llega a ser tan universal como para abarcar entre sus
seguidores a un amplio abanico de ideologías? ¿No está ésta ligada a la
sensibilidad y nada más y, que ésta la
puede tener cualquiera? ¿Son tan melifluos estos artistas como para no
establecer una marcada línea que separe la progresía del conservadurismo en sus
interpretaciones? ¿Somos todos los suficientemente demócratas como para aceptar
a nuestro lado a un teórico oponente ideológico? ¿No será que este conocido mío
se encuentra alejado de la caverna conservadora, aún a pesar de contarse entra
sus filas? ¿No será que las canciones de estos tipos, o al menos algunas de
ellas, se escapan de cualquier encasillamiento posible para pasar a formar
parte de la memoria colectiva de un pueblo, una época? ¿Podrían ser comparables
a estos niveles gentes del tipo, Julio Iglesias o Perales, mas propios (a mi
entender) del gusto de los conservadores? ¡Casi que no!, ¿Acaso los conciertos, o los discos publicados
por los artistas, a día de hoy con sus desorbitados precios quedan reservados a
los que apenas les supone un “quítame allá esas pajas” en sus economías? Y lo
que es peor.... ¿no será que este conocido mío además de disfrutar del poderío
económico lo que le otorga grandes comodidades y privilegios, disfruta
igualmente del alimento del alma? Y digo esto, pues parecía que los que
tristemente llegamos a fin de mes, al menos nos quedaba el consuelo de poder congratularnos de ser los elegidos a formar
parte de una cierta comunión: artista, canción, público siendo estos últimos
los auténticos merecedores a su arte, a los que por afinidad en cuanto a, el
vivir, el creer, el padecer, se construyen las canciones de consuelo, de ánimo
de compromiso, de igualitarismo
canciones creadas con la mente y el corazón que viran claramente a un
solo lado del espectro ideológico, y digo más…
Cuando
Serrat cantaba, entre algunas aquello de: para la libertad…, o la de utopía, o
los macarras dela moral, o muchas otras y, Sabina un compendio de canciones en
las que retrata todo un decálogo de estilo de vida todo muy alejado de lo que
se entiende lo que es un pensamiento conservador, que antes bien, lo aborrece.
Cuando Sabina y Serrat eran los “sociatas” de la ceja era algo que se los
llevaban los demonios a quienes despreciaban y continuamente desprestigiaban el
status quo político de cierta época, que no eran otros que los seguidores del
partido P. Pero además es que, digo yo:
¿con qué derecho me apropio de estos cantantes o cantos así como otros se
apropiaron de una bandera o un derecho a creer que eran los que defendían una “unidad
de destino en lo universal”?
Preguntas
todas estas que en su enunciado incluye la respuesta
Rafael Cuevas
Rafael Cuevas
Los ricos gustan de mezclarse con la gente pobre y de dar limosnas, con eso se sienten mejor. La justicia social, ya es otra cosa...
ResponderEliminarEntra en cualquier web donde se enumeren las canciones de Serrat y/o Sabina y calcula cuantas tienen un contenido social/ político y cuantas son de amor en sus diversas formas.
ResponderEliminarLos de derechas tienen problemas sentimentales y leen a Machado.
Los bufones tenían carta blanca para reírse de los reyes o de los nobles en sus propias narices y éstos se lo pasaban en grande mientras aquellos les imitaban.
Al final el poderoso utiliza a sus críticos como una vacuna que le sirve para curarse de sus propios excesos.
Creo que hay personas de derechas que son muchos mas democratas y de mente tolerante y abierta, que muchos que se la dan de izquierdas y son raciastas, homofogos y les gusta El Arrebato,Bisbal etc...
ResponderEliminarYo ten conocidos que ganan mil euros y se sienten identificados con los polis que pegan,le parecen bien los recortes en educación,etc. Prefiero mil veces a tu conocido,que libertad da la cultura.
Es cierto lo de mezclarse entre el populacho como lo es, los problemas sentimentales y Dr. krapp das en el clavo con la vacuna que cura excesos.
ResponderEliminarEn cuanto a los demócratas de derechas y de izquierdas, es curioso, daría para otra entrada, en la que se analizaría la cuestión en los mismos términos.
No creo que el buen o mal gusto sea privilegio de una elite…de otra manera el Julito Iglesias estaría en la miseria.
ResponderEliminarYo admiro a Serrat y Sabina, pero quien me dice que en lo económico no están mas cerca de este hombre al que mencionas ( que por lo que se ve viene de un ambiente humilde)….igual el resto es el que esta en el sitio equivocado, ¿no se? Estas elucubraciones son como la pregunta del millón.
Un abrazo
Estas elucubraciones son unas elucubraciones más que no van a ninguna parte, que no sean simplemente, entender el mundo, para lo cual hay que reparar en las cosas y pararse a pensarlas, eso sí, si hay apetencia. Quizás después de haber reparado en muchas elucubraciones similares a esta se caiga en la cuenta de, o haber perdido el tiempo de la manera más tonta, o darlo por bueno porque se ha construido un complejo mundo de pensamiento y análisis de la realidad, que entiendo que es por donde van las cosas en este proceloso mundo de los blogs
ResponderEliminarNo me extraña que te sientas ofendido.
ResponderEliminarAcabo de mirar en el diccionario la palabreja…y no era mi intención ¡joe! Esto me pasa por no escribir con el diccionario en la mano.
De todas maneras me quedo con la 3º acepción de la RAE<<tr. desus. Trabajar velando y con aplicación e intensidad en obras de ingenio.<<
Pues aunque he reflexionado sobre el tema no me atrevo a decir que la música no sea algo universal, que todos (los de derechas, los de izquierda o los de centro) no tengamos los mismos intereses en los temas de amor, o que los temas políticos interesen más a unos que a otros.
ResponderEliminarEn mi caso, me inicié escuchando los discos que me llegaban de mis amistades, de mis hermanas, primas...luego todo eso se fue ampliando o encauzando según mis gustos también, no recuerdo en nuestra infancia, adolescencia que ya fuésemos de izquierdas o de derechas...y francamente, no quiero pensarlo. La música a mí me sirve para esto precisamente, para evadirme de todo eso, no lo quiero relacionar, no lo quiero ver como que es una forma de etiqueta o de manipulación de masas. Para mí un cantante es un poeta y no cabe más que la emoción y el sentimiento, a veces abstracto, a veces ilegible...quiero guardar esta parcela intacta aunque me has dado mucho qué pensar.
Besos
Gemma, probablemente tu razonable reflexión sea correcta y sentida. Con sinceridad, a mi me gustaría que también fuese así, de hecho en el texto he citado esa posibilidad entre otras, pero, me es imposible abstraerme. Por decir un ejemplo "suave" Recientemente la cantante de Russian Red, declaró que se sentía de derechas, que dicho así inocentemente, pudiera tener su gracia, pero como ella misma confesó posteriormente, "esto también supone que las ideas políticas afectan al modo de entender la sociedad", efectivamente esto es así.
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ResponderEliminarExtraído de aquí, (artículo de El País):
http://elpais.com/diario/2011/06/17/tentaciones/1308334975_850215.html
Ideología y canciones
Del underground al rock masivo, el credo político está más presente hoy en el panorama musical español de lo que muchos puedan pensar. Abordamos a seis músicos de diferentes generaciones para que reflexionen en voz alta sobre el valor de la ética y la estética del compromiso social en su profesión.
Nacho Canut
"No conozco a casi nadie que se defina como de izquierdas o de derechas, son términos que nunca me han interesado especialmente. Hay artistas que hacen letras políticas muy buenas, como los Specials, Paul Weller o, aquí en España, Lluís Llach. Yo no me considero capaz de hacerlo ni me lo pide el cuerpo. A lo más que he llegado es a componer sobre la libertad individual (A quién le importa) o sobre un vago sentimiento contra la religión organizada (El cielo esta vacío)".
Andrés Calamaro
"Mi generación cultivó cierto hedonismo ético, que se encontraba más volcado a la izquierda europea de Felipe González, un marxismo burgués con cierta conciencia. Mi raigambre ideológica tiene forma de libertades individuales, de defensa de un modo de vida, de análisis. Y también puede presentarse, ya en un marco artístico, como disparate político. Pero tengo suficiente letra para enmarcar una ética personal y funcional en cuanto a manejarme o dejarme manejar".
Bunbury
"Tampoco me importa mucho si Nena Daconte o La Quinta Estación votan a CiU o a UPyD. Mientras nos peleamos por si queremos Rajoy o Rubalcaba, nos meten goles por la escuadra. En un sistema bipartidista escoges los mismos perros con distintos collares. Existen problemas más importantes que las rencillas a las que quieren que juguemos los verdaderos intereses planetarios. Ante el Fondo Monetario Internacional todos somos iguales, o sea, la nada".
David Rodríguez (beef, productor de la bien querida)
"Los medios de comunicación son muy sectarios y hacen criba de los artistas con contenidos políticos. Salvo Extremoduro, no me viene a la cabeza ningún otro grupo politizado que tenga cancha en prensa, radio y televisión. Pienso, por ejemplo, en La Polla Records, que tenían mogollón de fans y muy escasa cobertura. Ahora que lo pienso, Extremoduro han calado más por sus canciones de amor que por su mensaje sociopolítico, ¿no?".
Rodrigo Caamaño (triángulo de amor bizarro)
"Los grupos 100% politizados me aburren, pero también me parece triste que la política pase a segundo plano. El pop siempre ha servido un poco de caballo de Troya para transmitir ideas sin caer en el sermón, a la vez que cantas y bailas. Además, todo el componente de liberación que trae consigo el pop y la música de baile es de por sí una manifestación política. Ahora a casi nadie del negocio le interesa eso, buscan el target universal, supongo".
Manolo Martínez (astrud)
"Yo estoy afiliado a un partido comunista y, desde luego, intento que lo que hago como artista no traicione mis convicciones políticas. También soy consciente de que hay gente, cuyo juicio respeto, que dice que todo arte es político. Supongo que esa gente diría que, en virtud de la casi total ausencia de política en mis letras, estoy haciendo música complaciente con el statu quo y, en esa medida, de derechas. Es algo que me preocupa y que no tengo del todo resuelto".
Gracias por el enlace y tu respuesta. No tengo mucho más que añadir porque me parecen bien todas las opiniones, son éstas las que corroboran que el arte es universal, gustará más a unos que a otros pero lo importante es que cualquier creatividad está ahí para despertar en nosotros algo. Y afortunadamente todavía queda algo de libertad para cantar desde lo más hondo hasta lo más infinito.
ResponderEliminarA mí Lluís Llach, me gusta más que cualquier político :D
Bueno, voy arriba, chiao.