
Este verano como casi todos este menda veranea en su pueblo (pocos recursos y ¡que coño! que me gusta) de apenas 7.000 habitantes.
Alejado de los avatares políticos, de la vida rutinaria, y laboral, intento desenchufar sin acercarme a ningún tipo de medios de información, no por falta de ellos ya que mi pueblo no carece de ninguno que se precie.
Pero la realidad es tozuda y la querencia un vicio. Así que en unos de mis paseos matutinos me tope de lleno con un cartel: 15M en Fuente del Maestre, 1ª asamblea, estáis convocados. La verdad es que no me extraño ya que es una de las poblaciones más reivindicativas, años llevan luchando contra la instalación de una refinería en sus inmediaciones y parece ser que están dando fruto.
A lo que iba, la curiosidad y compromiso por lo que, CREO, me pudo, y allí me acerque a escuchar a los muchachos que aunque no conozco, son como parte mía, (seguramente algún padre ha sido amigo de andanzas juveniles) la asamblea no fue multitudinaria, pero fue un primer paso a lo que siguieron una semana tras otra, pocas llevan y pocas adhesiones pero siguen en la brecha, cada viernes están frente al ayuntamiento, proponiendo comisiones y pasos a seguir dentro de sus posibilidades.
Si estoy orgulloso de la juventud que se moviliza en Madrid, Barcelona, etc. más orgulloso estoy de estos jóvenes que en pequeños lugares llevan el mensaje de la indignación sin ningún tipo de cobertura mediática.